Si una lectura bíblica no es liberadora para las mujeres, no es una buena lectura. Alguna grieta se ha abierto en 'el cuento' liberador del cristianismo y aquel eco lejano: '¡Dejadla! ¿Por qué la molestáis?' (Mc 14,6). Dice Elisabeth Schüssler Fiorenza que los análisis y la conciencia feminista permiten ver el mundo y la vida humana, así como la Biblia y la tradición, bajo una luz diferente y con unas 'gafas' distintas. Tiene como objetivo un nuevo compromiso y una nueva forma de vida, un proceso tradicionalmente llamado conversión. Las guías que presentamos en este Xirimiri tienen por objeto ayudar a que el trabajo académico pueda llegar a más gente y facilitar del modo más simple posible (divulgar no es necesariamente vulgarizar) los razonamientos y argumentos que proporcionen esas nuevas lentes para releer la Biblia bajo una nueva luz, a fin de comprometerse con una nueva consciencia. Hemos elegido estudiar la obra 'Pero ella dijo' de la citada autora porque es una de las más relevantes e inspiradoras de la hermenéutica y exégesis bíblica feminista contemporánea, aceptada ya como un clásico de la interpretación bíblica.
