ParÃs no se acaba nunca es una revisión irónica de los dÃas de aprendizaje literario del narrador en el ParÃs de los años setenta. Fundiendo autobiografÃa, ficción y ensayo, cuenta la aventura de redactar su primer libro. Y nos desvela, por ejemplo, cómo le ayudaron a escribir esa novela los consejos que le dio, resumidos en una breve cuartilla, Marguerite Duras, su muy atÃpica casera. Es también la historia de cómo viajó a esa ciudad para imitar la vida bohemia de escritor principiante de Hemingway, quien contó, en ParÃs era una fiesta, que allà fue «muy pobre y muy feliz», y de cómo, por el contrario, el narrador fue muy pobre y muy infeliz. Aunque, eso sÃ, logró allà escribir su primera novela y descubrió que, como decÃa John Ashbery, después de vivir en ParÃs, uno queda incapacitado para vivir en cualquier sitio, incluido ParÃs.
